Parejas en el porno

Según recientes estudios, más de un 20% de las parejas entre los 18 y los 30 años se han grabado alguna vez teniendo sexo. Es algo que, gracias a las nuevas tecnologías, resulta hoy más sencillo que nunca, las cosas como son. De hecho, basta con tener un móvil con una cámara decente y buscar un buen ángulo. Estos vídeos, por supuesto, suelen quedarse en privado, y sirven para que la propia pareja se recree en su placer, para que compartan opiniones al respecto del sexo… A muchos les encanta verse disfrutando en la cama, aunque para otros esto es algo bastante vergonzoso, incluso cuando solo lo comparten con una pareja. En algunos casos, estas parejas deciden abrirse al mundo y colgar los vídeos en la red, para mostrar al resto de mortales cómo de bien se lo pasan en la cama… y en la ducha, el jardín… El porno amateur de parejas se ha convertido en uno de los géneros más populares en las plataformas online actuales, donde muchos suben su propio contenido a canales propios.

Y es que hay personas que no tienen tabúes a la hora de mostrarse haciéndolo ante una cámara, siempre que sea en la compañía de su pareja. Esto es algo que llama mucho la atención porque al fin y al cabo, el mundo del porno siempre ha sido visto como promiscuo. Una industria donde una chica puede estar con decenas de hombres en un año, grabando escenas diferentes con cada uno de ellos, e intimidando de esa manera tan especial. Los actores y actrices son profesionales por encima de todo, y esos encuentros quedan normalmente en el lugar de trabajo, pero a veces es imposible que no salte la chispa. Cuando estás con una persona dejándote llevar por el deseo más intenso que has probado jamás, por mucha cámara que haya delante, tú sientes esa conexión. Tanto es así que en muchas ocasiones, los propios actores porno han terminado siendo pareja en la vida real, más allá de sus escenas juntos. Es una tendencia que se ha mantenido con el tiempo y que sigue siendo bastante habitual hoy en día, por ciertas razones que también vamos a explicar a continuación. Lo interesante es entender que incluso cuando tienes una pareja dentro del porno, la libertad para estar con otros actores debe ser total.

Un sector complicado para relaciones estables

Pongámonos en contexto. Somos una chica joven, de veintipocos años, que está disfrutando ya de las mieles del éxito en el sector de la pornografía. Nos va bien, trabajamos a menudo, tenemos muchos proyectos por delante, pero más allá del trabajo, también queremos encontrar el amor. ¿Es que no pueden ser acaso románticas las actrices porno? Como cualquier fontanero, médico o profesional en otros oficios, una pornstar puede tener una vida más allá de su trabajo, donde se muestre además muy diferentes a como son en su oficio. El hecho de que sean estrellas reconocidas en todo el mundo por disfrutar del sexo con hombres diferentes no significa que no puedan buscar relaciones estables.

El problema viene, tanto para ellas como para ellos, en que es muy complicado conseguir una pareja que entienda de verdad lo que supone que tu chico o chica se dedique al porno. En los últimos años, la apertura sexual ha facilitado en cierta manera ese entendimiento, pero ni mucho menos se ha llegado todavía  un punto en el que realmente estemos dispuestos a aceptar como normal algo así. Los celos suelen aparecer pronto, por más que queramos ir de abiertos y liberales. Si tu chica está cada día con un chico distinto, aunque sea su trabajo, tú debes tener una seguridad en ti mismo a prueba de cañonazos para sobrevivir a esa relación. Por eso es natural que en muchas ocasiones, los propios actores porno entablen relaciones de compromiso, sean tradicionales o abiertas, ya que solo ellos se pueden entender entre sí.

Muchos profesionales salen entre ellos

Esto es algo habitual en la industria desde hace mucho tiempo, aunque tampoco vamos a decir que sea lo que todos hacen. Hay muchos actores y actrices que encuentran parejas fuera del porno, y llevan una vida de lo más normal con ellas. También hay otros que entienden que, por su oficio, eso de tener relaciones estables es casi una utopía, y prefieren disfrutar del momento. Pero el hecho de encontrar a tu media naranja en un rodaje pornográfico no es ni mucho menos descabellado, y para muestra, hay muchas parejas de estrellas porno que han sido célebres, o lo siguen siendo hoy en día. Ahí tenemos al carismático Brad Amstrong, por ejemplo, que estuvo varios años con Jenna Jameson y luego se casó con Jessica Drake, presumiendo de haber estado con dos de las estrellas porno más deseadas del siglo.

Stoya y James Deen también compartieron relación durante muchos años después de coincidir en varios rodajes. Lo mismo ocurrió con Tori Black y Tee Reel, ella una auténtica diva, él un actor del montón que sin embargo, logró enamorarla por completo. Nacho Vidal y Franceska James duraron más de una década juntos, e incluso el mito español llegó a asegurar que se retiraba del porno para no estar con ninguna otra mujer que no fuera su esposa. Marco Banderas también se ha llevado toda la vida junto a su esposa, la también pornstar Fionna Banderas… Los casos son casi infinitos y siempre encontramos ternura y mucho amor en ellos, en relaciones que nos demuestran que también se puede creer en el amor teniendo sexo con otros.

Escenas exclusivas para parejas

La otra versión de esto son aquellas parejas que se dedican a disfrutar del porno solo entre ellas. Normalmente son chicos y chicas que comienzan de forma amateur, como explicábamos al principio del todo, subiendo videos a plataformas, a veces sin que se les vea la cara. La discreción era importante para ellos, porque al fin y al cabo, no sabían si iban a ser vistos por mucha gente. Algunas productoras han encontrado un auténtico filón en estas parejitas, chicos muy naturales que ofrecen un morbo espectacular en este tipo de escenas. Es sexo real y se nota la complicidad que hay entre ellos porque no son actores, sino simplemente dos chavales follando ante la cámara. La productora de Torbe hizo de hecho una serie durante años solo con parejitas, algunas reales, otras impostadas, que tuvo muchísimo éxito. Gente como Miriam y Jorge Prado surgieron de esas escenas.

En el mundo latino este tipo de parejas se llevan bastante, ya que no están interesadas en disfrutar del sexo a través de una productora, sino en ser ellos quienes controlen su contenido. Las facilidades que ofrece Internet para esto hoy en día son absolutas, y cualquier parejita puede convertirse en la nueva sensación de Internet, con solo grabarse y subirse a la red teniendo sexo. Luego, una vez tengan más popularidad, tal vez piensen en grabar con terceras personas, o incluso adentrarse en la industria como tal. Pero cada vez es más habitual comenzar con tu pareja, y mantenerte con ella mientras el éxito llega. Tal vez por la complicidad y la seguridad que da disfrutar del sexo con alguien que ya conoces, o simplemente, por el hecho de sentir algo especial por esa persona.